Recetas de castañas: ¡el otoño llega a la cocina!
El inconfundible aroma de las castañas asadas es sinónimo de otoño. Pero también de un montón de recetas con castañas que llegan dispuestas a robarnos el corazón. Por suerte, en Galicia sabemos, y mucho, de castañas y contamos con la IGP Castaña de Galicia que reconoce la calidad de nuestras castañas. Sin duda, la mejor materia prima para todas las recetas que te traemos en este post.
Recetas saladas con castañas
Empezamos nuestra propuesta de recetas de cocina con castañas con un par de ideas saladas para todos los gustos. Desde entrantes hasta platos principales, las castañas ofrecen un montón de posibilidades y con este post queremos que las exprimas al máximo.
Crema de castañas y setas
La primera de las recetas fáciles con castañas que te traemos tiene un sabor y una textura tan especiales que perfectamente podría ser el primer plato de cualquier celebración especial. Además, es súper rápida de preparar y hasta puedes dejarla hecha con antelación. ¡No se le puede pedir más!
Empieza pelando 400 gramos de castañas, si son IGP Castaña de Galicia mejor que mejor, y pelando 300 gramos de setas variadas. A continuación, pela y lava una patata y pela y pica una cebolla.
Calienta una cazuela con tres cucharadas de aceite de oliva virgen extra y pocha la cebolla durante unos 5 minutos. Después, añade las setas y rehógalas otros 5 minutos. A continuación, añade la patata, las castañas y el laurel y vierte 3 vasos de caldo vegetal hasta que cubra todo. Sazona y deja que se cocine durante unos 35 minutos para que las castañas se pongan tiernas.
Por último, retira las castañas que hayan quedado enteras y tritura el resto. Salpimenta al gusto y añade un poco de nata líquida hasta conseguir la textura que más te guste. Decora con par de hierbas aromáticas secas, ¡y a comer!
Arroz con castañas y dátiles
Aunque pueda parecer una mezcla poco convencional, la realidad es que las castañas y el arroz crean una combinación increíble y esta receta con castañas no hace más que demostrarlo. ¿Nos ponemos con ella?
Corta 3 corazones de alcachofas en gajos y rocíalos con el zumo de medio limón. Después, saltéalos con un chorrito de aceite de oliva virgen extra hojiblanca hasta que estén dorados y resérvalos para más adelante.
Sofríe también una cebolla rallada, añade 500 gramos de arroz redondo y remueve un par de minutos. Entonces, vierte 100 mililitros de vino blanco y deja que se consuman. Cuando lo hagan, agrega 750 mililitros de caldo de verdura y, cuando se consuman, añade otros 500 mililitros más. Incorpora también las alcachofas, 300 gramos de castañas cocidas y peladas y 8 dátiles.
Si notas que el arroz se queda muy seco, puedes ir añadiendo poco a poco más caldo hasta que lo tengas al dente. ¡Y listo!
Solomillo con salsa de castañas
Una buena salsa es capaz de transformar un plato sencillo en algo de otro planeta. En la que te proponemos aquí utilizamos un ingrediente que es apuesta segura en esta temporada: las castañas con IGP Castaña de Galicia.
Para empezar, pela 200 gramos de castañas y ponlas a cocer en una olla con agua unos 20 minutos. Cuando estén cocidas, escúrrelas, pásalas por agua fría y retira la piel fina que las cubre. Ahora debería salir sin problema.
Pela y pica 2 chalotas y sofríelas en una sartén con un chorrito de aceite de oliva virgen extra. Una vez sofritas, añade las castañas peladas, 200 mililitros de nata líquida y un poco de caldo de pollo (la cantidad dependerá de la textura que quieras conseguir). Mezcla bien, tapa la sartén y deja que se cocine a fuego suave durante 20 minutos. Pasado este tiempo, pon la salsa en el vaso de la batidora y tritura bien. Si la notas muy espesa, añade más caldo.
Por otro lado, pinta cuatro solomillos de ternera con aceite de oliva y cocínalos sobre una plancha o sartén unos tres minutos por cada lado. Salpimenta al gusto, riégalos con la salsa, espolvorea un poco de orégano y…¡qué aproveche!
Postres con castañas recetas fáciles
No podíamos hacer un post de recetas hechas con castañas sin incluir un apartado de propuestas dulces. Nos ha costado decidirnos, pero os traemos dos que están para chuparse los dedos y no dejar nada en el plato.
Bizcocho de castañas con hojas de chocolate
Hay pocas personas que se puedan resistir a un buen bizcocho esponjoso y este, con castañas y chocolate incluidos, no es una excepción. ¡Marchando esta receta dulce de castañas!
Lo primero será precalentar el horno a 180ºC. Mientras esperas a que alcance la temperatura, puedes aprovechar para ir batiendo 4 huevos con 75 gramos de azúcar moreno.
Agrega 100 mililitros de aceite de oliva arbequina, 125 gramos de yogur y 250 gramos de crema de castaña y bate todo bien para conseguir una mezcla homogénea. Incorpora 250 gramos de harina y 16 gramos de levadura tamizadas y vuelve a mezclar bien. Vierte esta masa en un molde engrasado y déjala en el horno unos 40 minutos. Espera a que enfríe para desmoldar.
Mientras se cocina el bizcocho, puedes ir preparando las hojas de chocolate. Para eso, funde 70 gramos de chocolate negro y coloca un par de hojas verdes, previamente lavadas, sobre una rejilla. Píntalas por una cara con el chocolate y deja que se enfríe hasta solidificarse. Sólo entonces puedes probar a desmoldarlas sin miedo a que se te rompan. Decora el bizcocho con las hojas ¡y a servir!
Buñuelos de castañas
Le damos una pequeña vuelta de tuerca a uno de los postres más típicos del otoño para incluir un ingrediente también muy otoñal: la castaña. El resultado no puede estar más bueno, haz la prueba y nos cuentas.
Echa en un procesador de alimentos 200 gramos de castañas cocidas y peladas y tritura hasta que consigas un puré suave. En un tazón, bate 2 huevos junto con 50 gramos de azúcar y una cucharadita de levadura en polvo. Agrega el puré de castañas y 100 gramos de harina y mezcla hasta tener una masa uniforme.
Calienta aceite de oliva suave en una sartén profunda a 180ºC. Mientras esperas a que llegue a esa temperatura, forma pequeñas bolas de masa con la ayuda de dos cucharas. Cuando las vayas teniendo listas, fríelas hasta que queden doradas y crujientes.
Retira los buñuelos y colócalos sobre papel absorbente para quitar el aceite sobrante. Espolvorea azúcar glas por encima ¡et voilá!